¿El poder de los gemidos en el sexo? Sí, no crea que nos equivocamos porque es de eso justamente lo que queremos hablar. El sexo, ¿qué levante la mano a quién no le gusta? Mmm se las dejamos difícil, porque a esta altura no nos pueden mentir y este placer culpable ocupa la mente y hace gritar de placer.
¿Gritar? Díganle como quieran, pero no es nada parecido a ese grito que soltamos cuando estamos en un juego adrenalínico, porque es de euforia y en un plano completamente distinto. Los gemidos a la hora del sexo toman bastante protagonismo porque para algunos es un símbolo de placer y que evidencia que la relación sexual es placentera.
Sin embargo, no podemos decir que a todos les gusta lo mismo porque el silencio podría ser muy poderoso también a la hora del sexo, porque deja en el misterio lo que realmente están sintiendo y solo con observar a tu pareja podrías identificar lo bien que lo está pasando.
No quiere decir que si el gemido es menos intenso, el placer sea menor eso es cosa de cada persona y depende del nivel de confianza que tenga el uno con el otro, porque hay quiénes gritan a más no poder y se escuchar en todo el edificio, y ahí sí que están en graves problemas, porque no creo que a sus vecinos les guste imaginar lo qué están haciendo.
Ellos disfrutan cuando su pareja siente placer y es importante tener este feedback a través de los gemidos, que es una herramienta que no falla a la hora de detectar como realmente lo están pasando, pero no se confíen porque también puede ser fingido y nada de lo que parece es tan real.
¿Por qué fingir? Bueno para ellos es más simple fingir un orgasmo y lo hacen para que su pareja sienta que todo va viento en popa, pero realmente no lo está pasando nada de bien y simplemente han preferido fingirlo para evitar preguntas como ¿Lo estás pasando mal? ¿Por qué? y quién sabe si ese no fue un buen día y no pasa nada más.
Y tú ¿qué poder crees tienen los gemidos en el sexo?
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